miércoles, 1 de septiembre de 2010

La pizza que no te esperas

Septiembre, mes de nostalgia, aunque algunos afortunados programan aún una semanita de relax en una tierra de buen comer, me lleva a los recuerdos. No soy de buena memoria (lo cual es bueno si os olvidáis de felicitarme el día de mi cumpleaños: ¡nunca lo sabré!), sin embargo recuerdo la sorpresa que me llevé este verano con una pizza (soy así de sencillo).

Me habían hablado de un restaurante que hace "la mejor pizza de Madrid"...Sé perfectamente la cara que puse cuando me lo dijeron: otra "mejor pizza de Madrid"...pero, ¡¿cuantas hay?! Y, como decía el gran Corrado:...e non finisce qui! Resulta que la "mejor pizza de Madrid" la hacen en pijolandia...eh, justo allí, ¡en La Moraleja! Sí, la "lujosa urbanización residencial situada en el municipio de Alcobendas, muy cercana a la ciudad de Madrid".

Ahora bien, se sabe que yo tengo mis prejuicios y mis manías: soy mayor, ¿que le vamos a hacer? Entonces, si alguien me dice que se come bien en un restaurante hecho y pensado por gente adinerada y acostumbrada a tenerlo todo, yo no me lo creo y pienso que, claro, algún listillo vende una pizza por 20€ y alguien menos listillo la paga y piensa: "Si vale tanto, tiene que ser buena...". Vamos, como aquellos que eligen el vino por el precio (por esto Francia exporta tanto vino...). Eh, sí, soy así...

La información acerca de "la mejor pizza de Madrid" en La Moraleja (!) había sido borrada de mí memoria (creo que tengo neuronas-rémoras que se ocupan de limpiar mi cerebro...), pero el destino me llevó a cenar (en óptima compañía, por cierto...) muy cerca del restaurante en cuestión y, por comodidad (sí, también los pobres son vagos...), acepté cenar "la mejor pizza de Madrid". Así que ahora tengo que decir que la pizza del 'Café Pino' es una buena pizza, la mejor pizza que he probado en Madrid, ex aequo con la de mi (ex) pizzeria favorita (algún día hablaremos de ella...). Eso sí, podrían copiar las clásicas pizzas italianas e incrementar la oferta, o sencillamente poner en la carta la pizza que yo pedí: una 'prosciuto' (¡sic!) con champiñones (¡no tener una 'prosciutto e funghi' es un delito!).

PD: Ya sé que estáis pensando: restaurante en La Moraleja=restaurante caro...po', ¡no! las pizzas no son nada caras.

Un álbum: 'Napoli. Punto e a capo' (1992, Renzo Arbore e l'Orchestra Italiana).

sábado, 15 de mayo de 2010

La comida del domingo pasado (II)

Me esperaba un GP de F1 aburrido, así que pensé que lo mejor era ponerse a cocinar y de vez en cuando echarle un ojo a la tele (y desgraciatamente un oído al señor Lobato...).

Hace unas semanas hice unos canelones con una receta del ya famoso Jamie Oliver y no salió mal, pero me quedé con el mal sabor de tener que rellenar pequeños trozos de pasta e intentar que se quedaran enrollados. Así que me dije: "Las santas mujeres de mi familia como lo hacen?". Y, en plan aparición de pelis años '80, me vino a la mente la imagen de mi madre con una cuchara de madera en la mano que me decía: "...se puede hacer también con las crepes". Me parece que el mensaje era más que claro. Manos a la obra, pues.

Así que me lo arreglé para hacer crepes por primera vez en mi vida (se agradeció mucho la ayuda que una buena persona me dió), preparé un ragú de carne picada y una masa de huevo, requesón y un poco de queso fresco de estos que no tienen sabor para agrandar el relleno (más nuez moscada).

Todo al horno con mucho grana y albhaca. Parece ser que el resultado fue optimo. Vamos, yo me comí cuatro super canelloni y me quedé más a gusto...

jueves, 29 de abril de 2010

La comida del domingo pasado (I)

Terminado el primer gran desafío de este año, he podido volver a los fogones. Relajante, como siempre. Así que el sábado yo estaba pensando: "¿Mañana que voy a comer? Tengo tiempo y el domingo merece ser celebrado con una comida en condiciones...".

Pensé en lo típico: pasta alla chitarra con ragú misto, gnocchi con ragú di maiale o ravioli con salsa di pomodoro (tomate)...Está claro, eso es "típico" para mí (o lo era...): son los platos que yo comería en un 'domingo italiano'. De repente me acordé que hace poco una amiga me dijo: "ayer hice una pasta con gamberi, zucchine e zafferano..."

- "Buena idea", dije.
- "No tienes la receta...", contesté.
- "Desafío!", grité.

Lo primero: el tipo de pasta...Sin duda larga. Y si fresca, mejor...pasta alla chitarra! Está claro que había que comprar gambas (gamberi) y calabacín (zucchine). El zafferano (azafrán) en mi casa no falta.


La preparación del plato la improvisé y creo que me salió bastante bien...No quise poner nata así que utilicé un poco de vino blanco (no tenía caldo de pescado y las gambas venía ya cocidas y sin agüita...sí, de ésta que queda en la bolsita...da como asquete, pero puede ser útil) para que no se quedara demasiado seco e intenté no cocer demasiado el calabacín.

Creo que voy a repetir la receta pronto: sencilla, rápida y muy rica!

...ya sé, ya sé: está mal que lo diga yo que estaba rica. Pero desafortunadamente nadie me acompañó en el desafío. 'Desafortunadamente' para vosotros! jejeje!

Un libro: 'Espera la primavera, Bandini', John Fante.

martes, 16 de febrero de 2010

La hipocresía del gato

Que mi país sea un país de contraste no es una gran novedad. Es el país en el que un jugador de fútbol no puede blasfemar, pero un eurodiputado puede pedir que la policía vaya "casa por casa" en busca de inmigrantes ilegales.

Ahora bien, Beppe Bigazzi, el "experto de cultura alimental" de La prova del cuoco, una especie de desafío a eliminación directa entre cocineros, ha sido despedido por explicar como se cocinan los gatos. Quiero aclarar una cosa: a mi este tío me cae fatal. Va de sobrado, habla con un acento marcadísimo y más que un experto de cultural alimental me parece un cuentacuentos que cuando no sabe que decir, lleva la contraria. Pero, en la única Circorepubblica del mundo, la diferencia entre el bien y el mal, la decide el audience y esto no puede gustarme…

Bigazzi (en la foto), 77 años de edad, explicó que la carne de gato se puede comer y él, por lo visto, lo hizo. Probablemente, tuvo que hacerlo. ¿Quién no sabe que antes la gente comía gatos cuando no tenía otra cosa? El experto explicó como prepararla y dijo que es mejor que otros tipos de carnes, haciendo referencia, evidentemente, a los otros animales que podrían comerse por necesidad en Italia.

Hacemos como que no sabemos que nuestros abuelos comieron cosas peores que gatos; hacemos como que no sabemos que el gato es un animal como otro, que viva en nuestra casa no lo hace diferente de un cerdo o de un pato; hacemos como que no sabemos que el último problema de Italia es que un señor de 77 años diga en la tele que comió carne de gato; y hablamos y discutimos sobre la carne de gato, sobre lo que se puede o no decir en la tele, y a qué hora, claro; despidamos a Bigazzi y vayámonos a la cama felices: el público del coliseo mediático ha dado su veredicto, la audiencia ha triunfado.

Mientras tanto, más de un italiano habrá pensado: "¿Carne de gato? Si sigue así…"


-La foto de Bigazzi es de la página web de 'La prova del cuoco'-

domingo, 7 de febrero de 2010

Pizza party

Nos costó un poco. Entre obligaciones sociales varias y la ruptura del horno, creo que hemos tardado más de un mes en quedar para comer una pizza casera hecha con mucho cariño y poca experiencia. Era la primera vez.

El resultado no ha sido malo. Personalmente, pensaba que iba a salir peor y sentía ya la risa maléfica de Mr. Telepizza que decía: "Ríndete y llámame...llámame...". Pero, no. Creo que la pizza salió bastante bien y que la cena fue divertida. No vamos a buscar la razón de la diversión ni en el infinito debate sobre los Blur, ni en los videos de Norma Duval y Lorella Cuccarini, incluso si dieron su buena contribución...

Todo se acompañó con tres buenos vinos y unas cuantas cervecitas. La velada acabó en un bar heavy de la calle Malasaña. Yo digo: experiencia positiva, se puede repetir...Quizás lo del bar heavy lo dejamos de lado, no?

Os dejo con un gran video...jejeje!